Abuso de antipsicóticos: un peligro silencioso pero creciente para la salud pública
Esta revisión aborda el aumento del uso fuera de indicación de los antipsicóticos, especialmente los de segunda generación. Estos fármacos, diseñados para tratar trastornos graves como la esquizofrenia y el trastorno bipolar, han demostrado eficacia en el control de síntomas psicóticos. Sin embargo, su prescripción se ha extendido más allá de las indicaciones aprobadas, lo que plantea riesgos significativos para la población.
Uno de los aspectos más preocupantes es el impacto cardiometabólico asociado a estos medicamentos. El artículo describe cómo el uso prolongado puede provocar aumento de peso, dislipemia, intolerancia a la glucosa y, en consecuencia, una mayor morbilidad y mortalidad cardiovascular. Estos efectos se explican por mecanismos complejos que incluyen alteraciones en el control central del apetito y cambios metabólicos periféricos.
El fenómeno del uso “off-label” ocupa un lugar central en el análisis. Cada vez es más frecuente que estos fármacos se prescriban para problemas como insomnio, agitación o conductas agresivas, especialmente en poblaciones vulnerables como ancianos y niños. Esta práctica, carente de suficiente respaldo científico, incrementa el riesgo de efectos adversos y plantea interrogantes éticos y clínicos sobre la relación riesgo-beneficio.
El artículo también señala una brecha importante en la literatura: faltan estudios que cuantifiquen la magnitud del uso inapropiado, sus costes y sus consecuencias a largo plazo. Esta carencia dificulta la implementación de políticas efectivas y la evaluación del impacto real sobre la salud pública.
Ante este panorama, se proponen estrategias para mitigar el problema. Entre ellas, destacan la monitorización sistemática de parámetros metabólicos, la revisión periódica de las indicaciones, la educación médica continua y el desarrollo de protocolos que favorezcan la desprescripción cuando no existan criterios terapéuticos claros.
Proteger la salud cardiovascular y metabólica de los pacientes con enfermedades mentales no solo es una prioridad clínica, sino también un aspecto fundamental de una atención compasiva e integral.





