Eje intestino-cerebro: interrelación entre las alteraciones de la microbiota intestinal y el trastorno del espectro autista
El artículo explora cómo las alteraciones en la microbiota intestinal pueden influir en el desarrollo y manifestación del TEA, destacando el papel del eje intestino-cerebro como vía de comunicación bidireccional entre el sistema nervioso central y el tracto gastrointestinal.
Los síntomas gastrointestinales, como diarrea, estreñimiento y distensión abdominal, son prevalentes en niños con TEA. Estos trastornos se asocian comúnmente con un aumento de los síntomas conductuales, como desconexión social, ansiedad e irritabilidad. El aumento de la permeabilidad intestinal, atribuible a la disbiosis intestinal, desempeña un papel significativo en la alteración del eje intestino-cerebro, coordinado por vías neurológicas, inmunológicas y endocrinológicas. Los niveles elevados de citocinas inflamatorias, los cambios en la generación de neurotransmisores y las alteraciones en los metabolitos derivados del intestino se consideran consecuencias directas de la disbiosis. Las opciones de tratamiento, como los probióticos, los prebióticos, el trasplante de microbiota fecal y los cambios en la dieta, han mostrado resultados prometedores. Sin embargo, la eficacia y la seguridad a largo plazo de estas terapias aún se están estudiando
Aunque no se establece una relación causal definitiva, los hallazgos sugieren que la microbiota intestinal podría ser un objetivo terapéutico relevante para mejorar la calidad de vida de personas con TEA.


